Durante los últimos meses ha reflotado en Coronel el problema de la calidad del agua potable, sumándose a la serie de problemas ambientales que registra una de las cinco “zonas de sacrificio” en Chile. Baja presión, agua turbia y con excesivo olor a cloro, es parte de los reclamos que habitualmente los ciudadanos hacen en diversos medios por el servicio que prestan las dos sanitarias presentes en territorios operacionales de la comuna: Aguas San Pedro en el sector norte/oriente y ESSBIO en el resto de la ciudad. Sólo por concepto de “calidad del agua” ambas empresas registran más de 160 reclamos ante la Superintendencia de Servicios Sanitarios SISS desde el año 2012.
El problema es muy sensible porque afecta la salud de las personas y también impacta directamente en la economía familiar. Al estar obligados a consumir agua embotellada se genera un gasto adicional que puede llegar hasta los $8.000 mensuales. Este mayor costo, sumado a la pérdida de ropa blanca por lavados con agua turbia, con justa razón indigna a los vecinos, más aún cuando sabemos que alrededor de 1.300 familias de Coronel pagan sus boletas de agua atrasadas por falta de recursos, teniendo que repactar sus cuotas de pago.
Pero como esta historia no es nueva, bien vale la pena recordar cómo son los hechos más recientes de la empresa que tiene más de 32.000 clientes en Coronel: ESSBIO S.A.
Con posterioridad al terremoto del año 2010, los reclamos asociados a turbiedad contra ESSBIO aumentaron en comparación con los años anteriores, debido a la existencia de fuentes con alta concentración de fierro y manganeso, que no eran abatidos con anterioridad al 2002. Esto provocó la acumulación de colonias de bacterias de fierro y manganeso en tuberías de producción y distribución de agua, especialmente en aquellas de fierro fundido (5% de la red). La gente observó en distintos puntos de la comuna el mismo fenómeno: agua turbia.
Fue así como en diciembre de 2014 la SISS sancionó a ESSBIO S.A con una multa de 250 Unidades Tributarias Anuales. La causa: agua turbia distribuida en numerosos sectores, situación que afectó a la generalidad de los usuarios durante los años 2011, 2012, 2013 y 2014. A consecuencia de lo anterior, la sanitaria implementó un publicitado programa de trabajo para llevar a cabo limpieza de redes, sumado a un programa de recambio, según antigüedad y estado de las tuberías. Sobre este proceso tan difundido por radio e internet, no se ha logrado saber a ciencia cierta su real impacto porque los episodios de agua turbia continuaron registrándose.
Los reclamos de los vecinos motivaron la acción de la propia Municipalidad de Coronel, la que interpuso en junio de 2017 un Recurso de Protección contra ESSBIO porque más de mil alumnos de las escuelas municipales se quedaron sin sus almuerzos por la mala calidad del suministro. Desde entonces, hasta los concejales llegaron a las oficinas de la Superintendencia a solicitar antecedentes y canalizar denuncias.
Unos meses más tarde, en diciembre de ese mismo año, un grupo de vecinos y el propio municipio por acuerdo del Concejo Municipal presentaron una querella contra ESSBIO (RUC 1710053264-6) ante el Juzgado de Garantía de Coronel por el “insalubre estado del agua” entre cuyas diligencias solicitó que policía se constituyera para investigar las redes de agua. En efecto, a inicios del mes de abril de 2018 los peritos de la Brigada de Delitos Medio ambientales (BIDEMA) de la PDI de Valdivia y por instrucción de Fiscalía especialista en delitos ambientales, desarrolló peritajes del agua potable en casas, establecimientos educacionales y en la propia Laguna Quiñenco, una de las principales fuentes de abastecimiento. Los resultados de estos exámenes se conocerán las próximas semanas.
Adicionalmente, frente a los numerosos reclamos y la acción de diversos actores, la propia SISS con fecha 9 de junio de 2017 instruyó un nuevo sumario, por deficiencias en la calidad del servicio de agua potable, el cual aún se encuentra abierto y a la espera de la resolución.
Considerando que las acciones administrativas y judiciales se encuentran en pleno desarrollo, es necesario que las familias de Coronel agoten los canales tradicionales de denuncia, a los cuales se suma el SERNAC que recientemente ha inaugurado nuevas dependencias en la comuna de Coronel.
Frente a la evidente pérdida de confianza ciudadana en los organismos sectoriales encargados de fiscalizar la calidad del agua y las empresas sanitarias, se hace necesario un PROGRAMA DE VIGILANCIA Y MONITOREO DE LA CALIDAD DEL AGUA que sea ejecutado por la propia Municipalidad de Coronel con el fin de que medir el Cloro libre, Coliformes, turbiedad, PH, Arsénico, Hierro, Manganeso y color, de acuerdo a lo establecido en la Norma NCh 409/1. Recordemos que los análisis de agua reportados a la SISS son elaborados por Biodiversa S.A una filial de la misma empresa que presta servicios de laboratorio, análisis químicos y biológicos. Por lo tanto, se requieren análisis más confiables.
La sanitaria no cumple su misión estratégica señalada en su Memoria Anual 2017 que propone “ofrecer un servicio que responda a las expectativas de clientes, autoridades y dueños, y se destaque por procesos eficientes, de alta calidad, con capacidad de anticipación y un costo justo”. En Coronel no estamos conformes con el servicio, pero estamos obligados a utilizar el agua turbia y pagar la cuenta a fin de mes.
Essbio debe invertir en mejorar sus sistemas de producción y tratamiento y ademas explorar nuevas fuentes de abastecimiento, considerando el alto estres al cual actualmente estan sometidas sus captaciones.