Una familia australiana sacó a pasear a su perro y encontró una millonaria sorpresa en las afueras del pueblo donde viven: una pepita de oro.
Ocurrió en el Día de la Madre, cuando un papá y sus dos hijas salieron por Bendigo, en Victoria y hallaron el valioso metal, mientras la mamá descansaba en la casa.
Según contaron a medios locales, donde mantuvieron el anonimato, iban pateando unas piedras y en un momento una de las niñas preguntó: “Papá, ¿esto es oro?“.
Sin saber cómo enfrentar el caso, tomaron la roca y la fueron a pesar a un supermercado.
La pepita de oro pesó 624 gramos y tiene un valor estimado en unos 17 millones de pesos chilenos.
“Hemos tenido tiempos difíciles así que esto es muy bueno para nosotros porque estábamos con problemas financieros“, reconoció el padre.
El sujeto dijo que tienen la pepita en su casa, pero quieren venderla apenas puedan: “Usualmente cuando encuentras una así de grande debe haber más oro cerca. Ojalá ese sea el caso”, agregó.