Con globos blancos, carteles, homenajes, canciones y significativos gestos, la comunidad educativa de la Escuela Artística Isaías Guevara Soto, de Lota, despidió a la alumna de cuarto año, Rocío Aravena Gálvez, pequeña que perdió la lucha contra el cáncer en la ex comuna minera y fue escoltada por sus compañeros durante su responso.
Apoderados y profesores la recordaron con mucho cariño, quienes entregaron palabras de afecto hacia ella.
Eduardo Fuentealba, presidente del Centro General de Padres y Apoderados de este establecimiento educacional, comentó que “es un dolor que parte el alma. Ella era una niña amorosa y muy alegre, la que se reflejó en el patio socializando con sus pares, con los tíos y profesores. Estamos tratando de sobrellevar lo vivido”.
En tanto, María Angélica Osses, apoderada de cuarto año, dijo que “estoy acompañando a mi nieta, ya que eran amigas. Ella era una muy buena alumna. Todos los querían”.
Vanesa Acosta, jefe UTP, describió a Rocío. “Ella era alumna de cuarto año. Cursó desde el nivel parvulario hasta ahora con nosotros. Ella destacaba por tener muchas habilidades. Además, de ser una muy buena estudiante, era muy buena compañera. Respetuosa, responsable con muy buena asistencia. Muy querida por sus compañeros, profesores y asistentes de la Educación. Siempre será recordada por sus cualidades”, comentó.
Ahora los restos de Rocío descansan en el Cementerio de Lota.
