Preocupación existe en el Gobierno Regional del Biobío por el comienzo y avance de la huelga de hambre de cuatro hombres al interior del Chiflón del Diablo, en Lota.
Determinación en el marco de la toma de la mina que se arrastra desde el miércoles, y en donde los manifestantes están a 580 metros de profundidad.
El intendente Jorge Ulloa, dijo que “naturalmente que cuando se habla de la salud de las personas estamos absolutamente preocupados. Vamos a seguir intentando a través de la seremi del trabajo, que está buscando los puntos de acercamiento”.
“Hay que hacer un llamado a quienes representan a la empresa, para que vuelquen el mayor esfuerzo en buscar acuerdos, al igual como se lo pedimos a los dirigentes de los funcionarios”, agregó la autoridad.
Baja de turístas
Desde la Corporación Baldomero Lillo han manifestado que hay una evidente consecuencia económica, ya que el paro se dio en plena temporada alta de turistas.